Ligh era un país frío, avanzado en tecnología, casi utópico, donde cada persona buscaba triunfar, llegar a la cima del éxito y codearse de la élite. El dinero y la tecnología eran el mayor interés de los ciudadanos en el país, los escándalos fiestas y mentiras abundaban en sus calles con luces neón. Wanda Walsh, una mujer poderosa en la industria del cine, dueña de Walsh Productions. Detrás de su rostro imperturbable, desea amor, pero no conoce los límites para entregar todo de sí misma. Es una mujer atractiva, inteligente y astuta, pero su corazón, que ha sufrido tanto, pide la mano amable de alguien que quiera protegerlo. Leo Takagi era sólo un empleado más en la gran empresa de los Walsh, un hombre musculoso, tatuado, con cara de pocos amigos, se consideraba un sobreviviente más en el frío Ligh. Sabía que tenía más posibilidades de seguir en su pequeña oficina recibiendo guiones malos a estar en la parte alta de la torre cerca de la mujer más importante del país, disfrutando de la fama y el dinero. Pero, ¿podía Leo captar la atención de Wanda? ¿Dos personas diferentes conectarían lo suficiente para amarse, o se volverían adictos a la idea de amor que cada uno tiene en sus cabezas? Wanda anhelaba amor sincero, Leo anhelaba el poder que traía consigo el dinero. Lo que tenía ella le interesaba a él, y lo que ella deseaba podía dárselo él. El amor puede ser un medio para su meta, si sabe jugar bien sus cartas. Son adictos a la sensación de placer que pueden ofrecerse, pero cada uno se reserva cuál es su verdadero concepto de veneno, que no temen inyectarlo en cada beso.

Lydie Lacroix era un Demonio Rebelde, se alejó de ellos pues ya no quería ser parte de aquello, lo tomaron como traición a los suyos que tanto la habían "cuidado" y ahora es parte del clan Deamonium donde encontró cierta paz para olvidar el pasado. Pero una sola cosa pondrá su tranquilidad de cabeza: el monstruo que la perseguía en sueños señalándola como una traidora ahora habita su mundo con un plan de destruirla. Lydie entiende que la invitación formal de aquel monstruo es sólo un aperitivo; hay algo mucho más grande preparándose, alguien mueve los hilos detrás de las cortinas para lograr lo que desea. Aunque: ¿Qué desea un demonio que nunca nada le podrá satisfacer? Lydie tendrá que enfrentarse a ello, en siete días antes de que el caos se desate frente a sus ojos.

Seducción: noches de relatos eróticos. Deja volar tu imaginación con cada relato que te dejo aquí, permíteme seducir tu mente con cada párrafo para desbordar en pasión. Advertencia: hay contenido BDSM, si no es de tu interés, pasa al siguiente relato, encontrarás muchos más. Acepto pedidos.

Dos chicos, una chica. Pero esta vez no será un clásico triángulo amoroso, ¿uno más uno igual a tres? ¡Está vez sí! Lily, Samuel y Tyler se verán envueltos en un amor complicado, nuevo y diferente. Después de unas cuantas salidas, deciden probar algo que jamás les había pasado por la cabeza: poliamor. Desenfrenados, audaces, elocuentes. Así es este trío, y no hay manera de que el amor no fluya entre ellos, pues había mucho por dar. ¿Serían capaces de enfrentarse a todos los líos de un amor sin manuales o antecedentes? ¿Sería un experimento o amor sincero? ¿Entregar el corazón a dos personas así sin más? ¡No temen del qué dirán! Juntos serían la ecuación perfecta.

El accidente sucedió en unos pocos minutos de manera desastrosa y dolorosa, el golpe en mi cabeza afectó mi memoria dejándome con conocimientos básicos, en el hospital que desperté me explicaron que existía la breve posibilidad de recuperar todo, o parte de lo que alguna vez fue mío. Azul, rojo, resentimiento, venganza, gritos: eso es lo que recuerdo del momento en que mi memoria fue totalmente formateada. ¿Cuál fue el verdadero accidente? Quiero saberlo, necesito entenderlo para poder así avanzar, o al menos comprender parte de la situación en la que me encuentro. Mis padres me explicaron sin muchos detalles mi vida, cómo fue mi niñez, qué tan buen estudiante era, en qué me desempañaba. Lo básico, con lo que pretendían satisfacer mi sed de interés, ¿quién no se encontraría como yo cuando toda su vida no es más que borrones y lagunas mentales? El supuesto accidente, no fue más que un arrollamiento que me dejó con rasguños, moretones y desesperación. Quizá ustedes aseguren que las cosas con las que mis padres pretendían llenar los huecos de mi memoria basta, ¿bien? No es así. Mi hermana me detesta, no poseo muchos amigos, recibo llamadas y mensajes bastante extraños, tengo un hambre insaciable y el director de la escuela donde doy clases quiere sacarme de mi puesto. ¡Genial! No pretendo recuperar mi vida con conceptos tan triviales e inútiles. Quiero saber, lo necesito. ¿Quién soy?

Maldije una vez más, la espada de doble filo en mi mano se sentía pesada. Me abrí camino hacia un barranco, pero era otra trampa. Un espejismo para los que intentan irse. Ya conocía estos lares y me sentía como en casa, pensé que yo seguiría siendo parte de todo esto... El trato me salvó de seguir aquí. "Seras parte de nosotros, por la eternidad. No tendrás escapatoria, no tendrás esperanzas, no veras la luz, no sabrás lo que es vivir con un alma... A menos claro que..." —sentí un nudo en mi garganta. Estaba tan nerviosa, ¿a menos qué? Eso era lo último que me salvaría la vida. —"Hagamos un trato, bonita".

La familia Fitzgerald vivió con un secreto y murieron por un error. Secreto: tienen en su poder una antigua gema muy valiosa y codiciada por todos los conocedores de su historia. Error: Mataron a la esposa del único hombre que guardaba el secreto. El hombre buscó venganza, matando a los padres de Nayla, la única hija del matrimonio quien siempre todos vieron como la pequeña reservada e inocente en un mundo tan complicado, y debelando el secreto a todo aquel que codiciara la gema fuera a cazarla para que alguno de ellos terminara con el trabajo que él no pudo. Nayla, quien no sabía de la gema, hasta ese momento, pues sus padres le ocultaron el secreto durante años, ahora debe protegerla a toda costa mientras sigue haciendo crecer el imperio de los Fiztgerald y trata de mantener su cabeza sobre su cuello. Nayla creció formándose como una asesina en toda regla, pero seguía siendo aún una niña desamparada a los ojos de los jefes más peligrosos y los sicarios con más experiencia, que no dudan en poder eliminarla de sus caminos para obtener tan preciado tesoro. Todos la subestiman por años, hasta que asesina a McCray, el Jefe de una gran organización, con muchos años de experiencia en el campo y muy respetado por toda la comunidad de la mafia. La niña de ojos de mar había demostrado su valía esa noche, pero también fue una invitación para el resto de los Jefes y sus organizaciones. Ahora más que nunca deseaban la gema, pero la verdadera excitación surgía en enfrentarse a Nayla y poder decir que mataron a la única que quedaba de los Fitzgerald. Nayla sabía lo que debía hacer, pero es humana y sus sentimientos también se ven afectados en el camino al conocer a Gwen.

Lydie veía a su al rededor con miedo, pues sabía que las cosas se habían escapado de sus manos. Nouk y Farah estaban de su lado, pero eso no era suficiente para hacerle frente a los demás demonios que los rodeaban ansiosos por su deceso, para sacarlos de su camino y liderar en grande. Larisa había logrado lo que deseaba, y no faltaba mucho para llegar al lugar por el cual siempre reclamó, sólo le faltaba una persona a su lado, pero sabía que vendría sin siquiera pedirlo.

Denna y Elliot Wall habían luchado en una guerra que sólo llevaba a la destrucción total de los magos, muchos murieron y los pocos que quedaron anhelaban morir después de tan atroces años. Gracias a ello, un ring de boxeo se presentó como una manera entretenida para gastar dinero y seguir disfrutando de ver sangre mágica derramada para todos los mundanos que acudían al sitio. Denna dedicó el resto de sus días a pelear allí, ganando dinero y mucho odio. Elliot, por su parte, se encontraba inmerso en algo más oscuro ya que después de la guerra, quería respuestas, aunque en medio de su búsqueda, se encontró con algo más difícil de manejar.

Elena Drawford estaba en un infierno disfrazado de paraíso, se encontraba en medio de un dilema: el amor de su esposo Adrián no era lo que parecía, él era un lobo disfrazado de oveja, y ella no lo aguataría más. Ella, una mujer de 29 años, con estudios y preparada, pero proveniente de una familia conservadora y machista, fue forzada a casarse con este hombre, fue privada de ser independiente, de conocer más, de crecer, y relegada a la sumisión, la esclava de un hombre déspota. ¿Algún día conocería algo más que un mundo de dolor, sumisión, esclavitud, servidumbre y miseria?