Gonzalo Los cuadros que Allison había preparado para su presentación eran increíbles. Tenían tantas cosas suyas, que podías saber que fue ella quien los pinto, aún teniéndolos en medio de otros cientos. Era la frescura, la vida que les daba, como si quisiera plasmar en los lienzos todos aquellos momentos que ella sentía que no pudo vivir, mientras se mantuvo encerrada. A pesar de que la timidez seguía siendo parte de su día a día, muchas veces en extremo, Allison había comenzado a salir más del apartamento. Ahora salía con Melody y sus sobrinos, con Carol, quien parecía haberla adoptado como su pequeño polluelo y con Morena, con quién crearon una buena amistad. Pero también visitaba a sus padres, ellos trataban de reconstruir la relación casi inexistente que tenían. No solo eso, los
Escanee el código QR para descargar y leer innumerables historias gratis y libros actualizados a diario