Lo miré de reojo salir junto con los dos caballeros que habían llegado recién, era increíble, ahora venía otra ex a provocar más revuelo, ¿Tan popular era el señor Kang?, bah, por supuesto tenía que ser, me bastaba saberlo con tan solo mirarlo, las mujeres se le cruzaban a propósito, aún sabiendo que ya estaba casado, eso me hizo recordar aquel incidente con la ex empleada.
Solo esto me faltaba, necesitaba sacar unas copias y no quería estar en aquel lugar escuchando como discutían por mi esposo… era absurdo, con razón todos hablaban de mi a mis espaldas, yo solo era la secretaria Ari y él, él era el presidente, un hombre inalcanzable que por alguna loca razón, yo alcancé, y eso por supuesto molestaba a todas.
¿Cómo podía enojarme?, hasta yo me sorprendía de haberme casado con él.
Ah
