Tenía ganas de salir corriendo, la mirada de Oliver me estaba carcomiendo, él ni siquiera estaba poniendo atención a lo que decía Lorenzo o los abogados, su mirada estaba fija en mi, y me estaba asustando como nunca antes, —Es así como ahora Malik Heland posee el cincuenta y siete por ciento en activos y desde ahora tomará el control de la presidencia—terminó de decir Lorenzo, nadie parecía feliz, —Señor Baruch, ¿Por qué vendió esas acciones a alguien externo a nuestra sociedad?, ¿Por qué no nos tomó en cuenta? — preguntó uno de los socios, —Pues verán, esto es lo mejor para la compañía, además como ya les dije, mi hijo aun estará presente, él verá por él bienestar de todos ustedes— respondió el señor Ernesto, —No hay nada que temer, esta empresa seguirá en desarrollo, sus interese