[LARA] Un mes después: 10 de febrero Maleta en mano, un corazón que late a mil por hora, y mis piernas que no dejan de temblar; así es como atravieso los pasillos del aeropuerto Marco Polo de Venecia en busca de Cami. A lo lejos le veo levantando su mano y al ver la manera en que ha crecido su barriga, me es inevitable no llevar mi mano sobre mi abdomen y sentir que todo ha cambiado. Me acerco rápidamente hacia ella y la abrazo con todas mis fuerzas. —¡Como te he echado de menos!— Digo entre lágrimas de felicidad y angustia a la vez. —¡Y yo a ti amiga!— Responde y hace que nos alejemos un poco para mirarme de pies a cabeza. —Te vez increíble.— Comenta y luego se queda observando fijamente mi abdomen —Espera... ¿tú?— Intenta preguntar —O has engordado... o...— Continua y asiento. —Te