Isabella entrecerró los ojos ante las palabras de su padre, ¿Quería hablar con ella? ¿En esta situación?
—¿Qué hay que hablar, papá? —preguntó, y cuando su pregunta fue recibida con silencio por parte de su padre y una mirada suplicante de su madre, miró entre los dos y bufó—. No me digas que de verdad crees que es el mismo Melvin que conocíamos.
—Es tu hermano, Isabella —insistió Benjamin suavemente.
—¡Ni de broma lo es! —Isabella se encendió de inmediato—. Está con Rodrigo, el mismo que intentó quitarte la empresa.
—Y el mismo que salvó a tu hermano —replicó su padre, dejando a Isabella confundida por un momento.
¿Rodrigo salvó a Melvin? Claro, sabía que Rodrigo estaba con Melvin, pero jamás se le había ocurrido pensar que pudiera haber sido el salvador de su hermano.
La expresión
