Capitulo 4. Primera transformación.
¡Por fin mi cumpleaños!, ¡Y mi primera transformación!
Me levanto y me meto al baño.
Salgo y me pongo un vestido azul celeste con flores y mis zapatos de piso con pedrería, bajo y veo a mi papá sintiéndome con un pastel en la mano.
- Mi hermosa princesa ya cumple 18, ¡Y su loba por fin despertara!- deja el pastel en el comedor y viene a abrazarme cálidamente y con mucho cariño.
- Papá, me asfixias!- se separa de mi y me sonríe.
Comemos el pastel con una charla tranquila, hoy por la noche se hará mi ceremonia, y habrá una fiesta invitando a todas las manadas del país, aprovecharan para ver si alguna chica es la Mate del alfa, o sea Jay..
Cuando llego al instituto viene corriendo Alice y me abraza creando así un espectáculo, fantástico.
- Feliz cumpleaños! - le sonrió.
- Gracias.. Vamos, que el profesor de matemáticas no nos dejara entrar- caminamos por los pasillos en silencio.
- Mi hermano me ha hablado esta mañana diciéndome que llega en dos semanas, ¿puedes creerlo?, Estoy tan feliz.
- Ya lo veo- le sonrió y ella suelta una carcajada.
- Sabes... Anoche tuve un sueño extraño..- dice pensativa- soñé que encontraba a mi alma gemela- dice con repugnancia, los vampiros en vez de un Mate, tienen una alma gemela una pareja eterna, algunos la encuentran en cuanto nacen, otros tardan siglos como es el caso de mi amiga.
- No puede ser tan malo Alice, piensa que tendrás quien te ame de verdad y- me interrumpe.
- Y estaré condenada a amarlo y estar con el ¡toda mi eternidad! j***r eso es un infierno, a ver que harás cuando encuentres a tu mate eh?
- Yo...- ¿Lo rechazare? Eso tenía pensado hacer, yo siento que es una condena, mi padre es un ejemplo de ello, cundo mi madre murió el se distancio de mi, luego volvió en si pero.. Se que esta muriendo poco a poco.. Debe de encontrar a su segunda oportunidad, bueno eso fue lo que le dijo mi tía Lizbeth ella es una bruja al igual que mi prima Camil. Después les contaré de mi loca y extensa familia.
- ¿Tú qué?- me saca de mis pensamientos Alice..
- Yo, no lo se, ¿vale?- entramos a la clase y todo el día se fue así, aburrido.
Ultima clase ed. Física y gimnasia, las chicas y yo aprovechamos esta hora para ensayar la rutina ya que pronto serán las nacionales y tenemos que ganar.
-¡Bien suban más alto a Peyton!, Sabrina un poco más a tu izquierda, si así .. Bien ahora ¡abajo!. Es todo por hoy, vamos a las duchas- les digo yo esto no es nada fácil. Siento una mirada en mi así que decido voltear hacia atrás y veo a Jay, no me siento enfadada más bien me siento dolida… El ya no es el mismo y no lo puedo hacer volver. Mi Jay.
Estábamos todos festejando, toda las manadas en completa paz, la música se escuchaba y veía a Alice tirándose a un chico muy guapo yo estaba con mi prima Camil. Platicando de no se que de verdad.
- Hola!, soy tu loba Lidia!
- Hemm, hola, soy Sam- estoy nerviosa. Tengo miedo.
- No temas, estarás bien, ahora es momento de tu transformación.
Papá me mira y asiento con la cabeza y vamos al bosque, todos me miran y hacen un círculo al mi alrededor, veo a Jay se le ve impaciente ¿Por qué?, la luna se posa frente a mi y los huesos me comienzan a crujir fuertemente, siento unos dolores terribles en todo mi cuerpo grito hasta que esos gritos se convierten en aullidos. Suelto un respiro de agotamiento, todos me ven sorprendidos y encantados, yo decido correr.
-¡Me siento más que viva! -le digo a mi loba, feliz.
- Lo se, Se siente de maravilla, acerquémonos a esa laguna para que te veas.- le hago caso y me veo. Oh por dios. ¡Soy bellísima!
Soy blanca y grande, nunca me lo hubiese imaginado. Estoy encantada conmigo misma.
- Es un placer se tu loba Sam - se oye feliz.
Comienzo a correr de regreso a la manada veo a mi padre que me espera con una manta, me acercó y… ¿¡Como carajo me transformó en humana!?
- Fácil, imagínate en tu forma humana y ya- dice mi loba.
Se lo agradezco y lo hago. Me voy directo a mi habitación y me encuentro con un ramo de flores Azules y una caja de regalo con un moño muy lindo. Tomo la caja y saco un libro, lo abro y veo que no es un libro, es un álbum de fotos, de Jay y yo, sonrió y no puedo evitar sentir nostalgia y dolor.
Lo sigo ojeando hasta que llego a la última hoja que tiene una foto de el en !a actualidad y otra de mi también en la actualidad separadas y un escrito hasta bajo..
- Lo prometiste.
Tengo que hablar con él, no puedo dejarlo así. Lo quiero…Si. Yo. Lo quiero…