Mariana
Me siento tan feliz a lado de León, no puedo describir todo el amor que siento por él, es un sentimiento que vive muy profundo dentro de mí, y el saber que él me ama igual, hace que me sienta la mujer más feliz del mundo.
— Alana, quiero que me perdones por haberte dicho todas esas cosas horribles cuando pensé que León y tu eran amantes – le pido afligida, le dije cosas muy feas y ella solo estaba ayudándolo, sentadas en la sala de mi casa, me mira y coloca su mano encima de la mía con cariño
— Mariana, no tengo nada que perdonarte, te entiendo, y me da gusto que todo se haya arreglado entre León y tu – me contesta, la abrazo con cariño, sé que Alana es mi amiga y nunca más voy a volver a dudar de ella, y menos de León.
La tarde pasa y una vez que León llega, cenamos los tres j
