La entrada de Amatista ya estaba a la vista y se podía ver el alivio en el rostro de los recién llegados, he vuelto a sumirse en el silencio después de la pelea entre Arthur y Rain. Grace en el fondo sabía que el príncipe aún tenía sentimientos por ella y asumió que ese era el motivo, pero no dijo nada, intentó varias veces curar a su amigo o hablar con él, pero este se mostraba reacio a hacerlo. Jim y Rain por su parte se ha dedicado a mirar de mala manera al susodicho. Las puerta de Amatista estaban abiertas y apenas entraron sintieron un vacío, el reino ya no era lo mismo, eso lo sabían, pero verlo con sus propios ojos para Grace fue peor que una pedrada. No podía describir como se sintió. A medida que iban adentrándose más veían las desoladas calles, algunas personas que se encuentra