Retira el vestido por mi cabeza dejando a la vista mi sostén blanco, vuelve a besar mis labios mientras traza sus dedos sobre mi muslo izquierdo hasta dar con mis bragas, introduce su dedo entre ellas provocando que eche la cabeza hacia atrás y sus labios terminan en mi garganta, sus labios mojados hacen estremecer mi cuerpo. —Oh... —arrastro mis uñas por su espalda, cierro los ojos con fuerza mordiendo mi labio inferior, mi respiración se vuelve agitada y no puedo controlar mi pulso. —A pesar de todo no puedes resistirte a lo que te puedo hacer sentir —ronronea con la voz ronca sobre mi piel. —Mmm... ah, Leonardo sí, más... —hundo mi cabeza en la almohada cerrando los ojos con más fuerza al sentir mi cuerpo temblar. —. Oh sí, ahhh —gimo llegando al clímax. Siento el frío de sus la