A Contracorriente © Safe Creative Código 2204040855844 IG: @anamarescritora Sila Moríns y yo ya habíamos regresado a nuestra rutina normal, él a la fundación con una pila de trabajo por hacer y yo, al hospital, como mano derecha de mi padre. Por fortuna, mis primeras semanas han sido muy buenas, ya que descubrí que mis conocimientos sobre pediatría están intactos lo que me hace muy feliz. Sin embargo, mis habilidades y movimientos son los que me están costando. Me es imposible inyectar, ya que la mano me tiembla y no me permite hacerlo sin que se mueva y cause dolor, por lo que me estoy enseñando a inyectar con la izquierda para poder lograrlo. Por ende, no puedo poner intravenosas, ni nada que tenga que ver con un procedimiento con bisturí o algo punzo cortante. Por fortuna, Cin