Narra Ángel: ¡Maldita suerte la tuya imbécil! ¡Maldita sea! ¡Por un demonio! Con enojo tiro las cosas que se encuentran sobre el escritorio—Esto no se quedará así—murmuro en voz baja mientras aprieto los dientes, no hago ni el esfuerzo por contenerme, dejo salir mi frustración entera. —Líder deberías calmarte—menciona Dan acercándose—Debes reconocer que poner a un novato en ese lugar no fue lo correcto. Le escucho hablar y me enoja bastante. ¿A lado de quien coños estas Dan?—pregunto enfrentándolo directamente cara a cara—Ese chico es un problema. Me mira Dan serio y parece dudar en responderme sin embargo se anima a hacerlo—Creo que te estas obsesionando con él, el hecho que haya entrado a nuestro grupo te ha hecho mal, es natural porque nadie había ingresado además de nosotros—op