Puedes correr tanto como quieras o desees, pero, no puedes escapar del destino, tienes que tener en cuenta y estar consciente de que las acciones que hoy hagas, realices, van a afectar el futuro.
De errores se aprenden, eso es lo que dicen, pero, mientras más te equivocas, menos puedes seguir adelante, las decisiones del ayer se convierten tarde que temprano en tormento en la vida de aquellos que ya de por si han sufrido por haberlas tomado.
Y eso es algo que el príncipe comprende a la perfección, por esto, el pecado y las cargas de los suyos, es el único que debe pagarlas.
Un largo suspiro se escapa entre los labios de Jordán mientras el inmenso cielo, el destino puede ser tan cruel a veces, él tenia un camino marcado desde su nacimiento y estaba seguro que debido a esto muchas pruebas
