EL LIBRO DE JOSHUA

CAPÍTULO VEINTIOCHO

LUCIA

"Tienes que estar bromeando en este momento" gruño y él se sorprende por la dureza de mi tono.

"Lu, sé que estuvo mal lo que dije ayer, y tal como te dije en esos cientos de mensajes de texto, lo siento mucho", murmura mirándome directamente a los ojos.

"¿Qué estuvo sólo mal? ¿De Verdad?" Pregunto, la rabia ya burbujea dentro de mí.

"Bueno, fue peor que mal, la cagué, lo sé, pero tienes que creerme cuando digo que realmente me arrepiento de haberte dicho esas cosas porque no lo dije en serio", suplica.

"No lo sé Joshua, siempre has tenido talento para los golpes bajos como los que me lanzaste anoche, siempre sabes cómo hacer más daño", le digo.

"Ay, eso dolió", dice haciendo una mueca y tocando su corazón teatralmente.

"Sí? No me digas", le respondo rodando los ojos.

“¡Lu, vamos! Solo déjame intentar disculparme de la mejor manera que pueda, si no estás lista para perdonarme al final del día, entonces puedes decirme que me vaya a la mierda y te dejaré en paz para siempre”, suplica poniendo ojos de cachorrito, y tengo que reprimir una sonrisa.

"¿A dónde planeas llevarme?" le pregunto.

"Es una sorpresa", sonríe.

"Odio las sorpresas", me quejo.

"No odiarás esta, te lo prometo", dice muy seguro de sí mismo.

"Prometes muchas cosas, ¿no?" Le respondo.

"Estamos muy peleoneros hoy, ¿no?" dice riendo y le frunzo el ceño.

Luego va a abrir la puerta del pasajero del auto para mí y mueve sus cejas instándome a entrar, pero tercamente planto mis pies en el suelo y cruzo los brazos frente a mi pecho, negándome a moverme ni siquiera un poquito, él me sonríe y comienza a caminar hacia mí, pero resoplo y levanto la barbilla tratando de ignorarlo, siento sus brazos rodeándome y lo siguiente que sé es que estoy suspendida en el aire y luego me arroja sobre su hombro, grito y me remuevo en sus brazos.

"¡Bájame!" le exijo.

"No grites o de lo contrario atraerás atención no deseada hacia nosotros", dice riendo y luego me coloca en el asiento del pasajero y me abrocha el cinturón de seguridad, asegurándose de que esté bien puesto en su lugar.

Inmediatamente empiezo a retorcerme, pero luego se acerca a mi cara y puedo sentir su aliento fresco abanicando el lado derecho de mi cara, "Si sales del auto, tendría que arrastrarte de regreso, así que piénsalo dos veces Lu", susurra en mi oído y puedo sentir escalofríos corriendo por mi columna.

Después de eso, se apresura a ponerse del lado del conductor y arranca el automóvil, el motor se despierta con un rugido suave y debo admitir que estoy impresionada de que este viejo automóvil pueda moverse.

Cuando expreso mi sorpresa en voz alta y Joshua bufa ofendido por mi comentario.

"Este es un clásico, uno de los mejores autos jamás construidos, por supuesto que puede moverse, y mejor aún, ¡puede correr!" me dice y luego aprieta el acelerador, de repente nos lanzamos hacia adelante y yo chillo de alegría, haciéndolo sonreír.

Tengo que ponerme el pelo en un moño alto para evitar que se enrede con el viento, pero aparte de eso, estoy disfrutando mucho nuestro pequeño viaje por carretera.

Después de un rato, me doy cuenta de que nos dirigimos a la autopista y fuera de la ciudad, así que le pregunto de nuevo hacia dónde nos dirigimos y él solo sonríe, pero no dice nada. Aproximadamente 45 minutos después de eso, se desvía de la carretera principal y se dirige hacia una carretera rural, ahora tengo mucha curiosidad por saber hacia dónde nos dirigimos.

"¿Qué estás haciendo? ¿Podrías decirme adónde vamos? " Le pido.

“Lo sabrás muy pronto, ten paciencia”, me dice.

Gruño, pero no digo nada más, después de 10 minutos en la carretera me estoy inquietando y me siento como el burro de Shrek II en la escena de su viaje por carretera a muy, muy lejano, ese pensamiento me hace reír y él me mira como si estuviera loca.

Estoy a punto de decirle el motivo de mi risa repentina, pero luego dice: "¡Estamos aquí!" Entonces miro hacia el frente y la vista me deja sin palabras, hay una cabaña de madera del lado izquierdo rodeada de un hermoso jardín lleno de flores, a la derecha hay una hamaca en medio de dos grandes árboles, y cuando miro hacia el frente casi puedo ver un lago en un pequeño prado, todo parece sacado de un cuento de hadas y no puedo contener el gritito que se escapa de mis labios.

"¿Qué es este lugar? No parece real", sonrío.

"Pertenece a la familia de Nate, él nos lo ofreció, para que finalmente podamos tener nuestra primera cita sin distracciones ni personas no deseadas", me dice con una dulce sonrisa.

Frunzo el ceño ante su comentario sobre personas no deseadas; Sé que se refiere a Tom o Mia, porque ama a Ben, así que no creo que sea a él a quien se refiere Joshua.

"¿Cuándo dije que quería una cita contigo?" Le pregunto sarcásticamente, pero parece que se toma en serio mis palabras y su sonrisa se desvanece.

"¿No quieres?" murmura tristemente.

"Quería antes de que me llamaras puta", me enfurezco.

"Lu, no sé de qué otra manera mostrarte la profundidad de mi arrepentimiento, si no crees en mis palabras, al menos déjame demostrártelo con mis acciones, por favor", ruega.

"Está bien, pero sólo tienes un día para hacerlo", le digo.

"Oh, cariño, te dejaré loca por mí en menos de dos horas" sonríe y puedo sentir sus palabras deshaciendo todas mis vacilaciones.

De repente me doy cuenta de que esta es la primera vez que estamos solos en más de dos semanas, y además de eso, estamos en medio de la nada con una casa entera a nuestra disposición.

Dios, ¿en qué me he metido?