Alaric Escucho como me explican los guardaespaldas que contraté todo lo que ha ocurrido en la entrada del spa. Realmente los contraté por seguridad, pero no esperaba que volviera a acercarse a Eda. - Volved a explicarme porque no podemos denunciar - Cierro los ojos y me froto la cara exasperado. - El papel se lo dió a una chica, que a su vez se lo dió a este chaval. No hay pruebas de que haya sido él. Ni siquiera ha roto la orden de alejamiento. Me importa una mierda la orden de alejamiento. Estaba claro que esa medida era ridícula. Me levanto de la silla, desesperado por poder liberar parte de la tensión que soporto ahora mismo sobre los hombros. Eda está en peligro y no se qué más puedo hacer para alejar a ese enfermo. Coloco la mano sobre el corazón y me froto el pecho con la espe