[KIRAN] Al día siguiente: octubre 24 De regreso a la oficina, sinceramente no tenía ganas de romper con aquella burbuja donde tan bien nos encontrábamos, pero no nos ha quedado otra opción más que volver a la realidad. En algún momento convertimos el trabajo en nuestro único sueño y en esa excusa donde nos refugiábamos constantemente, y si bien seguimos amando lo que hacemos, ahora los planos ya no son más ese sitio donde enfocamos nuestras miradas para no mirar al otro, ni las computadoras en esa realidad para evadir nuestro alrededor. El silencio de esta oficina que se rompe por momentos a causa de nuestras risas nerviosas y cómplices se rompe una vez más cuando su celular suena y al ver la pantalla se sonríe —Es el doctor, parece que escucho mi mensaje— Me avisa y sin decir nada má