[AIXA] El dolor de cabeza es tan fuerte que me hace abrir mis ojos, y al hacerlo, me doy cuenta de lo desorientada que estoy. Me cuesta muchísimo trabajo acostumbrarme a la luz artificial que hay a mi alrededor y me toma un momento darme cuenta de que mis muñecas y tobillos están amarrados «¿Qué paso?» me cuestiono por dentro y poco a poco recuerdo que estaba yendo a la farmacia cuando sentí que alguien me agarro. Vuelvo a mirar a mi alrededor, y me doy cuenta de que estoy amarrada a una silla que se encuentra en el medio de lo que pareciera ser una clase de galpón o algo así… —Mi queridísima Aixa, hasta que por fin despiertas— Escucho su voz y lo reconozco enseguida, tanto que mi piel se eriza por el miedo que me causa tan solo oírlo. Lo busco con mi mirada hasta que finalmente él ap