Ed y Judith llegaron sumamente preocupados a la estación de policía, era la segunda vez esta semana, —Buenas noches oficial, me dijeron que tienen aquí a mi hijo– dijo Ed cuando llegó a uno de los mostradores, —Nombre por favor— —William Weaver— El oficial miró a Ed e hizo un gesto con la boca, –Su hijo fue arrestado por alterar el orden, tiene que pagar una fianza de 300 dólares y una pena de 24 horas— dijo el oficial mientras miraba el expediente, –¿Y hay algo que podamos hacer para sacarlo hoy? — –No señor, lo lamento— –Tengo buenos abogados oficial, estoy seguro de que están acusando falsamente a mi hijo y….— –¡Hay por todos lo santos Ed!— dijo Judith un poco desesperada, sacó de su billetera alrededor de 1000 dólares y los puso sobre el mostrador, —¿Con eso es suficiente?