Jonas se encontraba en el salón de baile nuevamente con el cuerpo de Nirella ensangrentado, frío y sin vida entre sus brazos. Él lloraba desesperado y le pedía que despertara, que no lo dejara.
_ No, no, esto no puede estar pasando, no otra vez.
Alguien se acercó a ellos, era Alina y le decía con una dulce voz.
_ Mi amor, ¿Qué haces?, ¿Por que aun te sigues aferrando a alguien que está muerta?, Ven nuestra boda será dentro de poco, déjala.
Jonas la odio y si no estuviera sosteniendo a Nirella se habría levantado para matarla y acallar esa molesta voz. Él la ignoró y continuó abrazando a Nirella, desesperado sin saber qué hacer.
_ Si es un sueño, que alguien me despierte y si es mi realidad que alguien me mate, no quiero una vida sin ti mi amada Nirella.
Al despertar de su sueño, las
