POV HERNÁN El motor de mi auto ruge suavemente mientras tomamos la avenida que nos lleva al departamento de Clara. El tráfico no es pesado, pero el ambiente en el interior del coche es tenso. Clara, sentada a mi lado, está en silencio, con su mirada fija en el paisaje que pasa por la ventana. La llamada cortada de manera abrupta con su prima nos dejó una sensación inquietante. —¿Estás bien? —le pregunto, rompiendo el silencio. Clara asiente, pero puedo ver la preocupación en sus ojos. La miro de reojo, tratando de no mostrar mi emoción. Si bien Aylin ya estaba inquieta en la fiesta, no puedo creer que haya sido por su prima y no por un peligro en el entorno. Marina no mostró signos de tener lobo, pero si hay algo que la está poniendo en peligro, necesitamos averiguarlo. —Quizás debería