Estoy fuera viendo como Melek juega con sus perros, ella corre y ellos la persiguen en la nieve. Ella lanza tres pelotas y ellos van por ellas. Verla tan relajada me alivia - Cuídala – dice Sergey llegando junto a mí – quiero que me prometas algo – dice observándome - Emiliano, pase lo que pase, siempre debes protegerla, no permitas que nada le pase y si llegado el momento debes elegir entre ella y yo. Usa esto – dice entregándole un anillo con el escudo de la organización de los Ivanov – entrégame, ya sabes cómo llegar hasta aquí. Solo los Ivanov tienen este anillo, Melek tienen uno igual. - Lo haré – digo tomándolo y volvemos a verla – es un misterio – comento y el ríe - No es lo que crees -