Tanto Klauss como su vieja amiga tenían diferentes teorías acerca de Rachel y lo que sucedería con ella. Era obvio que su hija no era una simple humana; primero, por el simple hecho de ser hija del rey de los vampiros y segundo, porque ningún ser, mágico o no, podría resguardar a aquella leyenda. Es que, el solo mencionarla hacía temblar a cualquier ser sobrenatural o, mínimamente activar los nervios en cualquier rey; pues no se hablaba de cualquier ser sobrenatural, sino de la existencia de la misma creación del primer híbrido, el mal encarnado, le decían algunos. Los vampiros eran, de por sí, seres muy temidos en todo el mundo por tener un carácter frio y calculador. ¿Qué se podría esperar de ella, entonces? La primera vez que Klauss se percató que había algo más en su hija, fue cuand