— ¿A qué te refieres? ¿No es tu hija, entonces? — Fue lo primero que quise saber. Lo que padre había dicho me dejo con muchas dudas y también con un sentimiento de alivio, de alguna forma me hacía sentir mejor, no el hecho de que ella perdiera a su familia, sino más bien que papá no haya tenido hijos fuera de mi familia. Lo sé, sonó muy egoísta; sin embargo, no podía negar que de alguna manera me sentía mejor. Tal vez lo sea, tal vez sea egoísta. — Su padre era mi mejor amigo. — Lo escuché con mucha atención. Me gustaba mucho cuando me contaba cosas pasadas. — Eran una gran familia, su madre era una descendiente de las hadas, una bruja blanca. — ¿Bruja? — Cuestioné un poco confundida. ¿No se suponen que no se mezclaban o entendí mal? — Ya sabes cómo es el amor. — P