Zae Swer La madre de Demián suspira y respira tranquila al ver la mesa golpear el suelo con fuerza, todos respiran profundo y tranquilos. — Creí tirarias el jarrón — expresa con la mano en el pecho. Sonrío de lado al ver todos se encuentran tranquilos. — No, eso sería muy común — respondo poniendo el jarrón en el suelo y levantando la mesa. Esto fue lo único que los detuvo de seguir peleando como perros y gatos. Mi cuerpo se estremece bajo la mirada de ambos padres. — Me han oído, fuera de mi casa — gruñe Demian levantado el jarrón lo pone en el centro de la mesa. — Por Dios hijo, no seas tan duro y berrinchudo... — Madre — gruñe. Aprieto los labios para no reír poniéndome de pie, creí que Demian se llevaba muy bien con sus padres. — ¿Porque mejor no nos calmamos? — sugiero. — S