Al terminar la cena subí a mi habitación y luego de varias horas logré dormir. A la mañana siguiente bajé a desayunar y me encontré con mis padres esperándome para desayunar conmigo. -¿Y bien? ¿Nervioso por el partido hoy?- Preguntó mi padre. Como si se preocupara de verdad. Bueno da igual, por lo menos lo está intentando. -Lo normal- -La diferencia es que hoy juegas la última final de tu vida como colegial – -¿Era motivación o buscabas ponerlo más nervioso?- Mi mamá le hizo mala cara. Reí –Está bien, no creo poder estar más nervioso de lo que estoy- Terminé de desayunar y subí a mi habitación a alistar las cosas para el partido. Puse el bolso en mis hombros y salí de la habitación. -¿Nos vamos?- Preguntó mi madre al verme abrir la puerta de la casa. -¿Piensan ir a mi pa