Caminé por la oscura calle con la única compañía de mis pensamientos. A veces desearía no tenerlos, pienso demasiado aunque al final termino tomando las peores decisiones. Me senté en la acera y saqué mi teléfono. Entré a w******p encontrándome un mensaje de Santiago. -Me alegra que haya ganado, me gustaría llevarte a celebrar pero supongo que ya lo estás haciendo, de cualquier forma, espero que la estés pasando excelente, te lo mereces.- -Muchas gracias, aunque en realidad no la estoy pasando nada bien, aunque no puedo irme, ya es muy tarde para regresar yo sola al colegio- -¿Alguien te hizo algo? ¿En dónde estás exactamente?- Le envié la ubicación –Estoy en la calle, pero estoy bien, no quiero que te preocupes, solo te cuento porque necesito alguien con quien hablar.- Esperé