Luego de nuestro encuentro, nos limpiamos y bajamos al pasar un tiempo, lo hacemos con la certeza de que los amigos de Ian y sus padres saben qué estuvimos haciendo arriba.
Una parte de mí quiere desaparecer, pero Ian tiene otro plan y me lleva afuera donde la fiesta está en su apogeo.
A un lado están los Thompson en una mesa, los cuales nos saludan desde la distancia.
Es bueno tener caras conocidas en medio de estas personas.
Nos acercamos a Terrence y Fernando que nos miran con cejas arqueadas.
—Por poco se pierden el discurso de tu padre.
—Si bueno, Brooke necesitaba usar el baño.
—Por supuesto —replica Fernando.
Ian los fulmina con la mirada cuando nota que me remuevo a su lado.
Un camarero se acerca, tomo una copa y le doy un gran sorbo.
—Pueden al menos disimular sus rostro
