Dylan Desperté, sintiendo pequeños y suaves besos por toda mi espalda. Me encantaba amanecer con Nika, pero sabia que esta vez nos habíamos pasado y habrían problemas. Escape por la ventana de mi cuarto para venir y pasar la noche con mi compañero, quería empezar mi cumpleaños con él y si que me hizo sentir un feliz cumpleaños al dar las doce. Mis padres al descubrirlo, iban a intentar matarme, pero no había manera de ocultarlo. Esta vez, mientras Nika y yo hacíamos el amor le pedí que me marcara y él no dudo en hacerlo. Pero ahora con los rayos del sol colándose por las cortinas, no podía evitar caer en cuenta de que mi padre al descubrirlo, mataría a Nika con sus propias manos. -Buenos días cumpleañera ¿Te duele?- pregunto besando su marca, la cual aún picaba un poco. -Buenos d