Por motivos religiosos

Capitulo 7

Logan

¡Era un maldito! En verdad estaba jugando con mi propia suerte en esto.

Decirle que el auto estaba descompuesto fue algo improvisado, no pensé ni siquiera en la posibilidad de que ella supiera algo de autos, pero quería pasar más tiempo a su lado.

-Pajarito si sigues así, un animal vendrá a matarnos-ella sonrió, continuando su desentonada canción.

En verdad no mentía cuando me dijo que no podía cantar.

- Yo iré a Cristo. Que es mi fuerza y mi refugio y en las pruebas me da seguridad. Yo iré a Cristo que me sostiene y me tiende su mano cuando estoy caído. Porque es su palabra que nos a prometido, que aunque pase por momentos oscuros, él estará conmigo (wooooe) Su vara y su callado me dan seguridad- cantó aún más fuerte, si eso fuera posible.

Desde que termino de desayunar, todas las galletas, no había dejado de cantar. Enserio le hacia justicia a su mote, era un verdadero pajarito.

-Recuerda que te avise Sophie, nos perseguirán y comerán si sigues sonando como un animal agonizando. Enserio pides a gritos que te sacrifiquen.- eso provoco carcajadas, en su locura nada la ofendía, lo cual era muy bueno.

-Pues discúlpame por no ser una chica con voz de ángel, pero a mi manera canto bonito ¿O no?

-Muy a tu manera lo haces Sophie. Pero no puedo reparar el auto y cubrir mis oídos al mismo tiempo.- sonreí al verla poner  sus ojos en blanco. Era la primera reacción mundana que la veía hacer.

-Hombres… ¿Pero crees que podrás arreglarlo? Ya llevo dos días de retraso y a pesar de que ellas me olvidaron, seré yo quien tenga problemas. Veras la madre superiora es en verdad súper exigente y quiere que todo sea como ella lo dice, pero nunca sucede. Cada vez que me ve, me dice que espera que me enderece, ya que soy la oveja descarriada del convento. Pero solo son exageraciones, no hago nada fuera de las reglas. Bueno, a veces si lo hago, pero es porque me aburro.-mientras fingía tocar el motor, me reía entre dientes de como podía pasar de cantar, a volverse un loro sin freno.

-Si lo dicen es por algo ¿Haces tantas travesuras Sophie?

-No, pero todas mis hermanas coinciden en que puedo no tener filtro y eso no es digno de una monja. Debería ser callada, paciente y tranquila, pero solo soy ruidosa, impulsiva y arrebatada.

-Eres la excepción a las reglas.-Ella sin duda era algo único, no podía ser monja, había tanto fuego dentro de ella.

-Soy algo especial, pero no hablemos de mis virtudes, debo ser humilde, no me elogies. ¿Cómo va eso? ¿Ya algún avance?- solo debería esperar a que anocheciera, para quedarnos aquí.

-No, estoy trabajando en ello, solo espero acabar antes de que la tormenta llegue.- miré hacia arriba, viendo como el cielo se estaba oscureciendo.

En esta época, solían darse tormentas repentinas. Las lluvias y el frio eran algo cotidiano, pero Sophie no parecía muy contenta con la idea.

No era por tardar más tiempo, era otro nerviosismo. Imagine que podría tenerle a las tormentas, pero lo descarte.

-Odio las tormentas Logan. No tengo nada contra lluvias leves, pero tormentas con truenos y vientos, es demasiado. Un rayo podría caer y rostizarnos en menos de cinco minutos ¿Sabias? Son impredecibles y lo único que tenemos para salvaguardarnos es el auto.- ok, quizás si le temía a las tormentas.

-Tranquila Sophie, ahora haré una llamada para ver si pueden orientarme.-ella asintió, continuando con su desafinado cantico.

Me aleje varios pasos, intentando que no escuchara ni una palabra de la conversación que tendría con Patrick.

-¿Cómo va el camino? Me enteré de que subiste un polizón.- los chismes si que vuelan…

-Necesito pedirte un favor. Estoy parado a un poco camino, me la he pasado dando vueltas, pero ahora hubo un desperfecto con mi auto…

-¿Quieres que mande a alguien a revisarlo?

-No es eso, la verdad es que no tiene nada, solo quiero pasar más tiempo con Sophie. Pero me quede sin provisiones y mi pequeña pajarito come como tres lobos juntos.-o tal vez más.

-Eres tan idiota Logan ¿Estas perdiendo el toque con las mujeres?

-No, pero es más complicado de lo que imaginas.- mucho más, al punto de que quería ser monja.

-Mandare bastante comida, solo procura tener cuidado, se acerca una tormenta.-Y así salía la versión paterna que tenia Patrick.

Él podía ser bromista, pero nunca dejaba de preocuparse por todos los que lo rodeaban. Era la versión adulta y madura de Michael.

-Gracias Patrick, estaré al pendiente.

Ahora solo debía ver como tomaba la noticia Sophie, no estaba en sus planes pasar aquí otra noche eso seguro.

Quería llegar cuanto antes a la ciudad e instalarse nuevamente en su cómoda rutina.

-¿Esta todo bien?- preguntó al verme acercarme.

-No, de hecho parece que por hoy no podremos salir.- su mirada estaba directamente hacia mi, con los ojos enormes.

-¿Por qué no?

-Porque necesitamos ayuda para arreglarlo, entonces vendrán y lo solucionaran, solo es un pequeño cambio.- o nada, pero ella no lo imaginaria.

-Cristo Santo, Logan. Dime que es una broma. – no era una broma, pero era una gran mentira.

-No lo es pajarito, debemos esperar un poco.

-Yo no esperaré, lo revisaré yo misma.-Dijo acercándose al auto.

Sonreí cuando comenzó a inspeccionar todo, enserio no tenia ni una jodida idea.

-Tampoco es tan mala mi compañía, te he tratado con respeto ¿O no?

-Yo nunca diría eso Logan. Has sido un perfecto compañero, pero he confesado mi atracción, no quiero tentar al destino.-Tiró de algo con fuerza hasta que ese objeto quedo en su mano. -Creo que lo terminé de romper

Había arrancado el cable  de unión. ¡Mierda! Ahora si estamos varados a la espera de ayuda.

Mi inocente plan para quedarme con ella, se volvió tan real. Lo mejor era que la misma Sophie lo había hecho. Pero lo malo era que si la tormenta se ponía fea, estariamos atrapados

-Pajarito, ahora si nos quedaremos aquí por siempre.- seguí mirando el cable en sus manos.

-Ya no podrás repararlo, ahora si o si, esperemos la ayuda 

¿Yo quería más tiempo con ella? Pues ahí lo tenia.