Nika
Una vez llegamos a casa del comisario, nos encontramos con una escena un poco desagradable. La madre de Dylan, estaba atendiendo las heridas de un niño de aproximadamente trece y catorce años. Por lo que se veía tenia varios cortes en el rostro, pero lo que más sangre emanaba, era el profundo corte que traía en la cima de la cabeza.
El niño se veía cansado, bastante débil, como si llevara mucha sangre perdida. Algo que sin duda estaba todo en su cabello, el cual parecía ser rubio, pero ahora era zanahoria.
-¿Aryeh te encuentras bien?- preguntó Ordoñez al joven. Pero mientras los miraba a ambos no dejaba de pensar que si él se encontraba así, ¿Cómo estaría Dylan?.
-Sí, me preocupa Dylan, ella estaba forcejeando con ese hombre. Tío Ben, intenté detenerlo, pero me tomo por sorpr
