Oz
Cierro la puerta de mi oficina despidiendo a mi paciente y esperando a que ingrese el último para poder irme a casa, como siempre, el increíble paisaje de Nueva York me acompaña haciéndome sentir tan grande desde esta altura y al mismo tiempo tan insignificante en este mundo.
Recibo un mensaje de mi asistente indicando que mi paciente canceló la cita, así que invito a mi buen amigo Jack Daniel's y me dejo llevar un poco entre mis memorias. Era un día parecido al de hoy cuando tuve aquel sueño con ella, ha sido uno de los recuerdos que más atesoro, aun cuando no es real.
Nunca más volví a soñar con algo así, a veces solo se presentaba y la veía como si yo fuese un fantasma, no me veía ni me escuchaba, anhelaba que lo hiciera, pero no pasaba. Otras veces solo hablábamos, aunque nunca m
