Agosto – 3,390 a. C. Tierra: Villa de Assur Coronel Mikhail Mannuki’ili MIKHAIL La temperatura bajaba perceptiblemente cuanto más se acercaban al río. Los perros ladraban y los niños corrían por las calles, gritando sus nombres mientras Mikhail rodeaba el pueblo. Ninsianna saludó a cada niño por su nombre, casi haciéndole perder el equilibrio a su amado. Aterrizó en una ráfaga de plumas a pocos metros de la puerta principal. Antes de que ella pudiera zafarse de su agarre, él se acercó al umbral. Ninsianna soltó una risita cuando las alas de su amor quedaron atrapadas ahí, incapaz de hacerla pasar a ella y a sus alas por la estrecha entrada. Se colaron por la puerta en un ángulo incómodo, dejando un rastro de plumas. —Mi mujer —la dejó en el suelo. —Mi marido —se puso de puntillas p