Capítulo 51: Horace ―¡Hostia!, Evie, ¿realmente dibujaste esto? ―Horace amplió la imagen en la pantalla de su teléfono, mirando su escultura en 3D. Estaban en el último descanso, el trabajo ya estaba tranquilo y los pocos clientes que quedaban ya habían sido atendidos, sentados en las sillas de afuera, disfrutando del fresco de la noche. Los dos acababan de devorar dos tazones de helado pavlova, que era su nuevo sabor favorito. Al menos hasta que encontraran el siguiente. ―¡Sí! ―dijo orgullosa, con los brazos detrás de la espalda y balanceándose sobre sus pies. ―Quiero decir, había visto tus bocetos pero no me había dado cuenta de que te habías vuelto tan buena! ¿Cuándo ha ocurrido esto? ―Vi algunos tutoriales, probé algunas técnicas… Todo está en internet, ya no tienes que ir a la esc