Todavía dolía volver a recordar aquella escena donde la puerta se cerraba detrás de él y como mi mundo se venía abajo en tan solo unos segundos. Mi pecho no paraba de doler y mi mal humor aumentaba cada vez más al pasar las horas, todo estaba fatal. ¿Cómo seguiríamos ahora? ¿Cómo podríamos retomar nuestros caminos si los sentimientos no podían ser desechados de un día para el otro? Habían pasado menos de veinticuatro horas de cuando le pedí que se alejara de mí, por miedo. Me costaba poder verlo y no poder evitar sentir todo lo que había pasado hacia meses atrás. Aunque no quería; el me recordaba a mi pasado. Todavía no podía creer como Kila había tenido la decadencia de ir junto a él en su intento de ''rescate''. Había pensado que ella al ver a su primo muerto sobre la acera y viviendo