Camino de un lado a otro por nuestra habitación sintiendo la impotencia en el pecho de no poder hacer nada para encontrarla. Ya han pasado dos meses de que ese Vasil se llevó a mi esposa y parece como si la tierra se los hubiera tragado. Hemos pedido ayuda a nuestros aliados, pero ellos tampoco han podido dar con ellos. La salud de Donato empeora conforme pasan los días y no tenemos noticias de ella. Hemos contratado a los mejores investigadores, los mejores Hackers, pero ninguno ha podido dar con ellos, aunque sabemos que la mano derecha de Vasil. Uriel es quien está a cargo de su organización en este momento. Yo no he dormido muy bien, ni tampoco comido, lo único que quiero es que mi esposa vuelva. Pienso en que no hemos tenido tiempo, toda nuestra relación fue tan rápida que siento que
