Vanessa Thompson.
Me miro al espejo después de leer el mensaje de hoy, tratando de pasar el nudo que se me forma en la garganta. Mis mejillas se sonrojan furiosamente y mis ojos brillan con emociones que no debería sentir.
Pero, en realidad, ¿quién dice eso?
Leer que él dice lo que tanto deseo, que él también desearía estar aquí tanto como yo lo quiero conmigo, me abruma y me lleva al límite de mi autocontrol.
Entro a consulta porque gracias a la contusión, debo hacerme chequeos regulares y más, al saber que son gemelos. Además que debo ponerme en control prenatal con un obstetra por el tiempo que ya tengo.
Fue difícil escoger uno, puesto que no conozco demasiado de esta ciudad, pero según Curtis, es uno de los mejores.
Al ingresar, me hacen llenar todos los datos para mi historia c
