Al día siguiente, Sofia no sonrió ni mostró un gesto amigable en la oficina, era como si se hubiera convertido en una versión femenina del frío Connor Thompson. Cuando entró en la sala del CEO, Connor incluso levantó una ceja al ver la expresión impasible en el rostro de ella, al CEO no le gustaba el aura que Sofia estaba emitiendo. ‘¿Acaso ha cambiado su imagen deliberadamente para mantenerme alejado?’ se cuestionó el hombre. Después de aclararse la garganta, Connor torció los labios – ¿Llegaste a casa a salvo ayer? –Por supuesto, de lo contrario, ¿cómo podría estar aquí de pie? La mejilla de Connor se contrajo, no estaba acostumbrado a tratar con una Sofia tan brusca. –¿Para qué me llamas? – preguntó la chica con un tono molesto. Connor suspiró resignado, sentía que la posibilid

