El regreso de los Ruiz de Con a España se retrasó, ya que su tío Francisco insistió en que se quedaran al menos un día para comer y cenar con la familia y pudieran convivir un rato más ya que en Diciembre no se verían para Navidad. Así que Luz se quedó un día más en México y aunque moría por regresar y ver a David, que estaba a punto de salir de guardia, supo que por el momento era lo mejor para poder pensar, así que el quedarse le cayó de maravilla permitiéndole disfrutar de la lluvia en la ciudad para apaciguar un poco el calor de Madrid.
—Parece que el cielo se está cayendo.— Le comentó a David por videollamada mientras ella estaba sentada en la gran sala de su tío.
—A ver, muéstrame México. — Le dijo él simpático mientras Luz veía el pequeño cuartito de descanso en el hospital.
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