—Enserio que soy una estúpida por creer en ti por un segundo. Ver la cara de esa mujer solo me trae los malditos recuerdos de esa noche en que lo encontré infraganti con ella en su departamento. Víctor me toma de la muñeca para que no me mueva de mi lugar. —¿Qué hace esta chica aquí? —Lo mismo me pregunto yo —murmuro molesta y el me mira en advertencia —Es la verdad y no me mires así. —Cuando me llamaste para que habláramos sobre nosotros… —¡Ah, así que el fue quien te llamó! —me cruzo de brazos —Bueno, entonces yo me voy…. —Tú te quedas aquí. —Víctor reafirma su agarre —Entiendes. En verdad que esto comienza a fastidiarme demasiado ya que no me suelta, el le llama para hablar sobre “ellos”, yo no tengo porque estar presente pero quiere obligarme a que este con ellos. —No tienes a