[JULIETA]
Esto es exactamente lo que necesitaba en estos momentos, tenerlo a él a mi espalda rodeándome con sus fuertes brazos mientras que el ritmo de la música nos lleva a movernos pegando nuestros cuerpos como si no hubiera un mañana. Me siento muy liviana, tal y como si estuviera flotando, pero Mateo es quien me regresa al suelo cuando sus sensuales labios besan mi cuello y con una de sus manos mueve mi cabello a un lado. Sonrió al sentirlo así y me muevo provocativamente pegada a él —preciosa…— me susurra al oído.
—Mmmm…— murmuro y llevo mi mano sobre la suya que está apoyada en mi abdomen.
—No soy de palo cariño…— dice finalmente y rio.
—Es bueno saberlo. — rebato y si, lo deseo y quiero que él se sienta igual. La música sigue a todo volumen mientras que las luces van cambiada
