Han pasado tres semanas desde que regresé a trabajar, mi rutina volvió a la normalidad, hemos tenido un poco de todo, desde pequeños incidentes con fuego, accidentes automovilísticos, peleas que terminan bastante mal, serpientes en el jardín e incluso un rescate de una pareja que fue a hacer senderismo y terminaron extraviados en la zona. Lo único malo de todo esto, es que Destiny no ha salido de mi mente como lo esperaba, incluso he llegado a soñarla en varias ocasiones, para luego despertar con una dolorosa erección por la mañana, eso me tiene frustrado y furioso, no entiendo qué me está pasando. He estado en la puerta del edificio en el que tiene su oficina y no me animo a entrar, no quiero molestarla y que se sienta presionada o peor aún, que piense que estoy tratando de sacar ventaj