Una noche especial La noche para las chicas estaba siendo mucho más movida de lo que habían esperado; algunas ya andaban desaparecidas de la fiesta, mientras que unas pocas todavía se encontraban bailando en el medio de la pista, entre cientos de personas de otros países. Ya en estado de ebriedad, después de las incontables rondas de tragos, Emily espera el regreso de su pelinegro enamorado; aunque no quiera admitir del todo su ya creciente atracción por este hombre, al que conoció dos meses atrás. Por su lado, Sarahi lleva a sus invitados hacia el habitáculo que mandó a preparar, especialmente, para la ocasión. —¿Qué es todo esto? —preguntan todos ellos al unísono, en el momento en que se abre la puerta y observan todo. La única que se sonroja es Damaris, quien entra seguida de Hade