Llevan varias semanas caminando, no han comido bien, solo lo que cazan en el día, conejos o ardillas, si es que tienen suerte.
William y Noah caminan al frente, tras ellos Elizabeth, Lara, Teresa con Ani en los brazos, Malik y Nico con Linda.
Ellos fueron los únicos sobrevivientes del último ataque del jefe, los demás habían muerto o se habían perdido por el bosque
La noche llega, duermen a la intemperie del frio bosque, William escucha un ruido y se acerca para averiguar que es, al llegar se topa de frente con Manakel, al ángel lo mira fijamente y William lo mira extrañado
— Manakel – dice William mirando al ángel
— William, ¿cómo estás? – pregunta Manakel
— ¿Cómo crees? – contesta William con ironía
— Veo que estas no son las mejores condiciones – dice el ángel mirando a su alred
