Volviendo a la gran propiedad de Andrés, Axel estaba obsecionado, después de ese día en el hospital, Leila lo tenía penando, el hombre no podía hacer más que recordar la forma en que Leila se movía, y como se burlaba de él descaradamente con cada oportunidad que tenía, Axel nunca había conocido una mujer así
- Dios solo pensar en ella esa suficiente para excitarme, su calida y humeda que estaba . . . Joder . . . - Axel volviendo en sus recuerdos, se le olvido que no estaba solo, y su cachondo sayayín se estaba trasformando sin querer, él solo no podía dejar de pensar en Leila
Andrés le dió una mirada de desagrado a Axel cuando escucho su comentarió
- parece que te he tenido muy libre ultimamente - Andrés seguía parado frente al gran ventanal, sin dejar de observar los pasos de su mujer,
