[OLIVIER] La observo con su traje de baño ya puesto y sonrió ya que son pocas las ocasiones donde nos hemos sentido así de relajados. Desde que estamos juntos hemos vivido en un constante sentido de adrenalina, miedo, y por supuesto angustia. Verla así es algo nuevo para mí, es redescubrir a mi esposa y aprender que nuestro matrimonio puede tener otras facetas. No voy a negar que los rastros que quedan en su piel por aquellos golpes me afectan bastante, pero tampoco quiero dejar que eso empañe nuestro momento. —Nunca me voy a cansar de mirarte— Le digo acercándome a ella y la abrazo desde atrás. —Sabes, me siento extraña, es como si no me pudiera acostumbrar a estos momentos de tranquilidad— Me explica haciéndome sonreír. —Me pasa igual, pero ¿sabes qué?— Le pregunto y beso su cuello.