[OLIVIER]
Cairo y yo estamos sentados frente en esta alejada mesa de uno de sus restaurantes favoritos después de un camino en absoluto silencio de su parte y yo no puedo dejar de mirarla e intentar deducir que es lo que le puede estar ocurriendo —¿Que desean ordenar?— Nos pregunta el camarero que se acerca a nosotros y a pesar de que hace su mejor esfuerzo, no puede evitar mirarla más de la cuenta.
Ordeno una copa de vino para mi, y ella pide una limonada de mango y fresa que por alguna razón se le antojo repentinamente. Él nos da algunas sugerencias del menú las cuales aceptamos de inmediato ya que la comida no es lo que más nos preocupa hoy y luego que nos quedamos solos vuelvo a mirarla fijamente.
—Estoy muy preocupado por ti, ya no se que hacer— Murmuro.
—Todo esto es muy difícil
