[CAIRO] 8:59PM Estoy nerviosa, muevo mi pie en el suelo y solo espero que todo esto salga bien. Respiro profundo y hago mi mejor esfuerzo para que todo esto no me afecte, aunque sé que es imposible. Vuelvo a mirar la hora y casi como si se tratara del más preciso reloj de todos, suena el intercomunicador de la casa puntualmente a las nueve. Miro a Olivier, quien sigue preocupado por esto, y me pongo de pie sabiendo que han venido por mí. Teresa, atiende y no es necesario que me diga nada —Diles que ya salgo— Le pido y realmente agradezco que hoy se quede aquí hasta tarde. Me acerco a mi esposo después de haber agarrado mi cartera, y él me abraza con fuerza —Por favor, no te olvides de ni una sola cosa de la que hemos hablado hoy ¿si?— Me pide en un susurro. —Todo estará bien mi amor—