Dos meses después Miré las hortensias y negué con la cabeza a la dependienta de la floristería. Había visto todo tipo de arreglos como tulipanes, rosas, lilas, garberas y otras más. —No me gustan como quedan—dijo a mi lado Sofía que era mi compañera en los preparativos de mi boda—Te diría que eligieras las gerberas, pero no se parecen a ti —Aquí tenemos un arreglo de peonías—dijo la dependienta. Eran color lila y otras rosadas—Son un poco costosas, pero valen la pena—las observe y me parecieron más a Aida —A ver si me explico—dije ya frustrada—Quiero un arreglo delicado y sencillo, pero que se vea hermoso—la dependienta me miro un momento pensando y asintió —Espere un momento—camino y se fue detrás de la tienda. Una vez solas resople — ¿Estoy siendo muy quisquillosa? —Mire a mi a