Llegamos al hospital y me atienden enseguida, mis hermanos deben quedarse en la sala de espera, el único que puede entrar conmigo es Ian, las enfermeras me piden que me tranquilice y que si quiero la epidural pero con ella no voy a sentir cuando debo empujar, así que prefiero hacerlo al natural aunque duela, peores cosas he aguantado y al menos este dolor es para algo bueno y no para matarme. La doctora entra y me revisa, todavía no he dilatado lo suficiente según ella, me dice que intente relajarme y que todo está bien, la doctora se va y me quedo sola con Ian, el pobre se va a llevar todos los insultos que salgan de mi boca, la doctora me ha dicho que hasta el parto mi familia puede estar conmigo pero prefiero estar sola con Ian. Después de dos horas el dolor incrementa, Ian llama a una