Cuando Emma se despertó se sobresaltó al ver la hora, eran las tres de la tarde, se había quedado dormida más de lo que tenía planeado. Adrian estaba a su lado, él estaba despierto y le preguntó. _ ¿Has dormido bien? _ Si, ¿pero por que me dejaste dormir tanto?, Ya es tarde. _ No pienso que sea tan tarde. Emma se levantó y le dijo. _ Aun no has comido y debes beberte la medicina, enseguida te traeré algo. Adrian tomó la mano de Emma y le dijo. _ No es necesario, estoy bien. _ Pero debes comer bien para recuperarte. _ Emma, tranquila, estoy bien, en serio, tú también debes de estar cansada, qué te parece si pedimos algo para comer. _ Está bien. Emma llamó para que les llevaran comida a domicilio, después fue al baño a lavarse la cara para despejarse. Al regresar Adrian estaba le